El esguince de tobillo es una de las lesiones más frecuentes, especialmente en deportes de impacto, actividades al aire libre o incluso en la vida diaria. Aunque muchos lo consideran una lesión menor, un tratamiento inadecuado puede derivar en inestabilidad crónica, pérdida de fuerza y dolor persistente. La fisioterapia es esencial para lograr una recuperación rápida, segura y sin secuelas.
En esta guía completa, conocerás en detalle qué es un esguince de tobillo, sus tipos y grados, fases de recuperación, técnicas de tratamiento y consejos para prevenir nuevas lesiones.
¿Qué es un esguince de tobillo?
Un esguince de tobillo es una lesión de los ligamentos que mantienen estable la articulación. Sucede cuando el pie se tuerce de forma brusca, provocando un estiramiento o rotura parcial o total de las fibras ligamentosas.
Tipos más comunes:
- Esguince por inversión: el pie gira hacia adentro. Es el más habitual.
- Esguince por eversión: el pie gira hacia afuera. Menos común, pero más grave.
- Esguince por rotación externa: producido por giros bruscos o impactos directos.
Clasificación por grados
- Grado I (leve): distensión sin rotura. Dolor leve y mínima inflamación.
- Grado II (moderado): rotura parcial del ligamento. Dolor, inflamación y cierta inestabilidad.
- Grado III (grave): rotura total. Dolor intenso, gran inflamación y dificultad para apoyar el pie.
Síntomas habituales
- Dolor localizado en la zona lateral del tobillo.
- Inflamación y enrojecimiento.
- Dificultad para caminar o apoyar el pie.
- Sensación de inestabilidad.
Fases de recuperación y tratamiento fisioterapéutico
1. Fase aguda (0-72h)
Objetivo: controlar el dolor y la inflamación.
- Reposo relativo y protección articular.
- Crioterapia (hielo) en intervalos de 15-20 minutos.
- Compresión con vendaje funcional.
- Elevación del miembro afectado.
2. Fase subaguda (3-10 días)
Objetivo: recuperar movilidad y evitar rigidez.
- Movilizaciones suaves y progresivas.
- Electroterapia analgésica.
- Ejercicios isométricos para mantener fuerza muscular.
3. Fase de rehabilitación activa
Objetivo: restaurar fuerza, movilidad y estabilidad.
- Ejercicios de fortalecimiento progresivo.
- Trabajo propioceptivo (equilibrio y coordinación).
- Terapia manual para mejorar la movilidad articular.
4. Retorno a la actividad
Objetivo: volver a la práctica deportiva o actividad diaria de forma segura.
- Ejercicios específicos según el deporte.
- Entrenamiento preventivo para evitar recaídas.
Técnicas utilizadas en Clínica Garval
- Terapia manual: movilización articular y masoterapia, muy utilizadas para mejorar la movilidad y reducir la tensión muscular en esguinces.
- Tecarterapia: estimulación profunda que favorece la regeneración tisular y la disminución del dolor, especialmente útil en fases subagudas y de rehabilitación.
- Punción seca y electroacupuntura: técnicas aplicadas en casos concretos para tratar puntos gatillo y mejorar la función neuromuscular, siempre bajo valoración profesional.
- Ejercicio terapéutico: programas adaptados a cada fase de recuperación para fortalecer y estabilizar la articulación.
- Educación preventiva: pautas personalizadas para evitar futuras lesiones, incluyendo recomendaciones de calzado, entrenamiento y hábitos de movimiento.
Prevención de esguinces de tobillo
- Fortalecimiento muscular específico.
- Ejercicios de propiocepción.
- Calzado adecuado según la actividad.
- Calentamiento antes de la práctica deportiva.
Un esguince de tobillo requiere atención profesional para evitar secuelas y garantizar una recuperación completa. En Clínica Garval, expertos en fisioterapia en Getafe, combinamos experiencia y tecnología avanzada para ofrecerte un tratamiento personalizado que te permita volver a tu actividad con seguridad y confianza. Reserva tu cita y comienza tu recuperación hoy mismo.